La vida es un continuo aprendizaje, si lo entiendes así y aprendes avanzas. De lo contrario te enrancias y estancas, te quedas en las quejas y lamentaciones, culpando desde el vecino del quinto hasta Dios de todas tus desgracias. Y entonces: Te pierdes la vida.
Disfruta de cada respiración que tomes, de cada paso que des, lo que hagas, aunque no te guste, hazlo con alegría y entrega pues de todas maneras lo tienes que hacer elegir la alegría te ayuda a que la tarea te resulte más corta.
Re-encontrarte con tu verdadera esencia es fundamental para tener un buen viaje, avanzar con paso firme, frescura y una sonrisa en tus labios.
El mundo te espera, tu tienes mucho que ofrecer.
Vivo con conciencia el presente porque la vida es un viaje sin retorno y al pasado no se puede volver.